La maldición de ser albino en el África subsahariana

Los 10.000 albinos que cuenta Malawi están en peligro. La ONU habla de un grupo amenazado por una “desaparición metódica”. ¿La razón? Las supuestas propiedades mágicas de los órganos o huesos de los albinos, por los que son mutilados y asesinados en varios países del África subsahariana.

. Después de 12 días de misión en el país, Ikponwosa Ero estimó que la situación de los albinos “constituye una urgencia, un crisis preocupante por sus proporciones”. AFP/Amos Gumulira

En Malawi, los albinos y sus familias viven aterrorizados. Niños, bebés o adultos pueden ser en todo momento secuestrados, mutilados y asesinados. El dinero no es el móvil, sino las propiedades mágicas que falsamente se atribuyen a sus órganos o huesos, según las creencias locales.

En efecto, distintas partes de sus cuerpos son usados en rituales que tiene por objetivo otorgar riqueza y poder. Esto ocurre en Malawi, pero también en varios países del África subsahariana., como Tanzania, Suazilandia, Burundi, Malí, República Democrática del Congo, Mozambique, Kenia…

La cuestión se ha vuelto tan grave que la ONU ha enviado a Malawi una experta independiente sobre los derechos de las personas afectadas por el albinismo. Después de 12 días de misión en el país, Ikponwosa Ero estimó que la situación de los albinos “constituye una urgencia, un crisis preocupante por sus proporciones”. “Es un grupo en peligro, amenazado de desaparición metódica si no se hace nada para poner fin a las atrocidades”, agregó.

En su informe publicado en 2012, la asociación canadiense Under the Same Sun (Bajo el mismo sol), que defiende la dignidad de las personas que viven con albinismo, repertorio 71 asesinatos de albinos entre 2008 y 2012, contando sólo los casos en Tanzania. La edad de las víctimas iba de algunos meses hasta los 65 años. En Malawi, a fines de 2014, la policía registró 65 agresiones, secuestros o muertes de albinos, explicó Ikponwosa Ero.

Los albinos son fácilmente distinguibles en el espacio público debido a su piel blanca, debido a una ausencia total o parcial de la melanina en la epidermis que afecta también el pelo y el iris de los ojos. Esta enfermedad genética hereditaria afecta a una de cada 1.200 personas de Malawi, pequeño país del África austral.

Es "dinero" que camina

"En el contexto actual, las personas que padecen albinismo están encerradas en un círculo vicioso de medio y pobreza. Muchos no duermen tranquilamente y reducen sus desplazamientos”, constató Ikponwosa Ero, quien es también albina. La experta de subraya la preocupación que le produce cuando albinos le cuentan que los llaman “dinero” cuando caminan por la calles.

La codicia puede llevar a que albinos sean secuestrados con la complicidad de su familia. El 29 de abril de 2016, un caso juzgado en Malawi ilustra la situación actual. Dos hombres fueron condenados a 17 años de cárcel por el secuestro y asesinato de una mujer albina de 21 años. Uno de los secuestradores era tío de la víctima.
Solidaridad de vecinos

En otros casos, la nigeriana Ikponwosa Ero se felicita por el apoyo de las comunidades a otros miembros que padecen albinismo. La intervención rápida de vecinos durante ataques ha logrado en varios casos salvar a víctimas y detener a los responsables, explica. En marzo de 2015, en el distrito de Nsanje, en el sur de Malawi, siete personas sospechadas de tráfico de huesos humanos habían sido quemadas por una multitud enardecida.

La venta de huesos y miembros de albinos puede significar ganar cientos de dólares, incluso miles de dólares por un cuerpo entero. En un país tan pobre como Malawi, donde el salario promedio es de apenas 30 dólares por mes, los escrúpulos pueden desaparecer con facilidad. Incluso muerto, los albinos no están en paz. Se ha informado de varios casos de profanaciones de tumbas, según la experta de la ONU.
Aunque Malawi, como Tanzania, haya endurecido sus leyes contra la brujería, aún no se ven los resultados.

Por este motivo, Ikponwosa Ero recomendó a Malawi la formación de policías, fiscales y magistrados para mejorar el conocimiento de marco legislativo actual que debe aplicarse en estos casos, la cooperación entre la policía y el ministerio público, así como medios suficientes para el fiscal especial recientemente designado.