"El Papa viene a México a pedir que Dios toque el corazón de los políticos"
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El sumo pontífice emprendió un viaje pastoral y apostólico a México de cinco días. El papa aterriza en un país en el que 80 % de la población es católica, pero donde, al mismo tiempo, la separación de los asuntos del estado y la iglesia es drástica y producto de una historia larga y violenta.
El especialista mexicano Bernardo Barranco traza las líneas básicas del principio de laicidad del estado en México:
" Hay un principio de separación histórico, dramático, que hemos aprendido. A partir de la fundación del estado nacional, o estado moderno, hay una ruptura dramática: independencia, pero hay otros que la llaman separación. En muchos países fue una separación natural. En México fue una separación dramática, violenta y traumática. Y la Constitución del 17 radicaliza esa separación e, incluso, la hace anticlerical. La "guerra cristera" es una manifestación de esta lucha.
"Lo interesante es que nuestro estado moderno está afincado en una dramática separación y que nos ha costado prácticamente un siglo madurar esta relación. Y aquí estamos. Ya el papa llega en otro momento histórico. Es importante señalar que la historia pesa también: muchos egos anticlericales pero muchos egos clericales también están ahí. Creo que el papa será un sano equilibrio entre esas dos dimensiones".
Sin embargo, a partir de 1992, con la reforma constitucional, la iglesia ha aprovechado para insmicuirse cada vez más en política.
Haydée García, de la organización 'Católicas por el Derecho a Decidir', lo recalca:
"Cada vez más se ha visto la relación entre la jerarquía de la iglesia católica mexicana con los políticos, en una relación donde la iglesia católica pierde su función de misericordia, de acompañar a los más necesitados. Y nos parece que es importante señalarlo, sobre todo porque la encuesta de opinión católica que hace 'Católicas por el Derecho a Decidir', que renovamos en 2014, dice que más del 70 % de la feligresía católica no está de acuerdo en que la iglesia influya en el ámbito político. Influye incluso en la generación de las políticas públicas".
"Ahí está una situación donde nosotras vemos que hay una línea muy delgada donde sí puede ser que la presencia del papa Francisco sea importante porque la jerarquía católica tiene que seguir los mandatos del papa. Entonces, ahora, nos parece importante que el discurso que tiene el papa Francisco sobre la convivencia pacífica entre las diferentes religiones se ve beneficiado por la laicidad del estado".
El sacerdote jesuita Sergio Cobo advierte que las ideas de Francisco pueden molestar a los políticos:
"El no viene como juez, viene a pedir que Dios toque el corazón de las autoridades ... a pesar de los esfuerzos que hagan las autoridades, que haga la iglesia, todavía hay situaciones que necesitan ser corregidas y que necesitan revisar con una autocrítica seria: dónde hay corrupción, dónde hay cómplices, dónde hay gente que debe ser sancionada por lo que está pasando. Viene a dialogar. Es un diálogo, pero un diálogo que está invitando a un cambio. Y puede incomodar a algunos grupos de poder que no les gusta que les llamen la atención".
Por todas estas razones, es posible que la presencia del papa Francisco en México tenga un impacto político en el país.
Entrevistados: Bernardo Barranco; Haydée García, organización 'Católicas por el Derecho a Decidir'; Sergio Cobo, sacerdote jesuita.
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