Francisco visita un México sacudido por la violencia del narcotráfico

Tras entrevistarse con el presidente cubano Raúl Castro y el líder de la Iglesia Ortodoxa Rusa en La Habana, el papa Francisco seguirá este viernes viaje a México, donde lo espera una apretada agenda. Se tratará de la séptima visita de un pontífice a México, el segundo país más católico del mundo, sacudido por la violencia.

El papa Francisco usa un sombrero regalado por una periodista mexicana en el avión que se dirigía a La Habana, antes de que Francisco continúe su viaje a México. Fuente: Reuters.

Por Patrick John Buffe, corresponsal de RFI en Ciudad de México.

Esta visita maratónica del papa no va a ser fácil. A sus casi 80 años, lo esperan cinco días muy movidos y cansadores que lo llevarán no sólo a Ciudad de México, sino también al sur y al norte, en Chiapas y Ciudad Juárez.

Serán viajes relámpago, pero que el Papa aprovechará para encontrarse con los fieles mexicanos y para impregnarse de la realidad de un país sacudido por la violencia, las desapariciones y los carteles de la droga.

Y seguramente sea por la situación tan complicada que atraviesa el país que los mexicanos ya estén expresando tanto entusiasmo hacia el pontífice. Tienen la esperanza o la ilusión de que Francisco pueda ayudar a resolver los problemas de esta sociedad tan golpeada.

De cualquier modo, ya que nadie le va a preparar sus discursos, el Papa puede reservar algunas sorpresas durante su visita, tanto a la jerarquía católica, muy conservadora, como a la clase política, sobre todo si decide poner en la agenda los problemas que aquejan a México y la urgencia de cambios en la Iglesia Católica.