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Colombia

Juan Manuel Santos: ‘El proceso de paz con las FARC es irreversible’

En una entrevista exclusiva con France 24, el presidente colombiano defendió la vía adoptada para refrendar el segundo acuerdo con la guerrilla, subrayó la necesidad de integrar a sus miembros a la vida política colombiana y su esperanza de ver avances en el diálogo con el ELN.

Captura de pantalla de la entrevista de F24 al presidente colombiano Juan Manuel Santos.
Captura de pantalla de la entrevista de F24 al presidente colombiano Juan Manuel Santos. Fuente: France 24.
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P: La decisión de otorgarle el Premio Nobel de la Paz fue una manera de recompensarlo por los esfuerzos hechos para alcanzar un acuerdo de paz con la guerrilla de las FARC y poner fin a una guerra civil que duró más de medio siglo. Pero, sorpresivamente pocos días antes había ganado el No en el referéndum, un verdadero revés. Tal vez este premio le sirvió para sellar el segundo acuerdo con las FARC que ahora ha sido aprobado…


R
: Ciertamente. Esta recompensa y el momento en que fue anunciada fueron un regalo de Dios. Cuatro días después de que el referendo fuera perdido por un muy pequeño margen -pero perdido-, reconocí el resultado y llamé de inmediato a un diálogo nacional para conseguir un segundo acuerdo teniendo en cuenta la opinión y las propuestas de la gente que había votado No, ya que todos habían dicho que querían la paz y tenía la obligación de que seis años de negociaciones no se vieran frustrados. Y el Premio Nobel fue como un mandato de la comunidad internacional y ayudó mucho.

P: Ahora el acuerdo ha sido aprobado, no por un referéndum, ya que usted no quería volver a utilizar esa vía, sino a través del Parlamento. Llega la parte más difícil, la implementación, que debe empezar en este momento, con los primeros pasos en los que las tropas de las FARC deben reagruparse en distintas zonas designadas. Pero existe mucha incertidumbre. ¿Confía usted en que se alcanzará la paz o sigue teniendo dudas?


R:
No. El proceso ha sido ratificado por el Congreso y es importante señalar que el referéndum no era obligatorio. Lo hice porque pensé que le daría mayor legitimidad a todo el proceso. Pero el presidente aquí tiene el derecho y la autoridad constitucional y legal para firmar el acuerdo de paz y el Congreso para implementarlo. Y estamos empezando a implementarlo. La única decisión pendiente está en la Corte Constitucional que debe decidir si el procedimiento de “fast-track” para aprobar la ley y las reformas constitucionales que son necesarias para implementar el acuerdo será permitido, lo que estoy confiado. El peor escenario es que la Corte Constitucional no apruebe el “fast-track”, pero de todos modos el Congreso puede aplicar el acuerdo. Lo único es que tomará más tiempo. Pero de todos modos realmente confío en que la Corte Constitucional aprobará el acuerdo de “fast-track”.

Entrevista en inglés.

P: Pero si esto no ocurre, ¿no le preocupa un eventual regreso de la violencia? Escuchamos a las FARC decir en estos días que no tienen una confianza total, hay un período de incertidumbre… ¿No teme que el acuerdo pueda volver a correr peligro de desintegrarse?


R:
El cese el fuego es frágil, porque tenemos 6.000, 7.000 personas armadas en el país que están esperando órdenes claras de qué deben hacer. Tenemos estas órdenes ahora. El día “D” acordado está en marcha, se están moviendo hacia los campos donde se van a concentrar y desarmarse. Mi temor era que se prolongara mucho en el tiempo, pero ahora tenemos una visión mucho más clara de lo que va a ocurrir y el proceso es irreversible. (…) Algo muy extraordinario debería pasar para pararlo.

P: Uno de los puntos más objetados por los detractores del acuerdo es la amnistía para los miembros de las FARC involucrados en crímenes muy serios, narcotráfico…

R: La amnistía no está en discusión, sino la posibilidad de su elegibilidad. La amnistía será la primera ley aprobada luego de que la Corte Constitucional dé su acuerdo al “fast-track”, lo que podría ocurrir antes de fin de año. He convenido con el Congreso que haya sesiones extraordinarias para aprobar la ley de amnistía. La otra cuestión es cómo vamos a elegir a miembros de las FARC en cualquier elección, ya sea para el Congreso…

P: O la presidencia…

R: La presidencia ya han dicho que no les interesa tener un candidato en un futuro cercano. Aquí el punto, todo el proceso apunta a darles la oportunidad de dejar las armas y que sigan luchando por sus ideales políticos pero en el marco legal constitucional. Si no les permitimos que sean elegidos, todo el proceso carece de sentido. Todos los procesos de paz en el mundo permiten a las guerrillas que dejan las armas participar en política.

P: Para que quede claro, ¿incluso todos aquellos que son culpables de haber cometido los peores crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad, podrán ser candidatos en el marco de este plan?

R: Los mayores responsables de crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra muy serios serán investigados, juzgados y condenados por el tribunal especial. Cada caso será juzgado individualmente. Los magistrados de este tribunal determinarán las condiciones de cada persona. Pero en principio necesitamos una vía para que toda esta gente participe en política porque es el propósito de toda la cuestión.

P: ¿Qué hay del narcotráfico? Usted y otros lo han combatido, pero parece que el acuerdo permite dejar esta cuestión de lado y decir “bueno, si era para financiar el movimiento no es tan malo”…

R: El narcotráfico no es un crimen político. El acuerdo no acepta el narcotráfico como un crimen político. Quiero ser muy claro en esto. Ellos aceptaron, y es un punto específico del acuerdo, cortar todos los lazos con el negocio del narcotráfico.

P: ¿Y lo van a hacer?

R: Lo tienen que hacer, o de lo contrario perderán todos los beneficios. Y no sólo tienen que cortar todos los lazos, sino que tienen que ayudarnos, ayudar al Estado a reemplazar los cultivos ilegales por cultivos legales. Y nos van a ayudar a luchar contra el negocio del narcotráfico. Ellos han reconocido que se han financiado con impuestos al narcotráfico. Es lo que dicen. Por primera vez tenemos la oportunidad de darles a los campesinos, a los productores de coca, un cultivo alternativo. Porque por primera vez no vamos a enfrentarnos con las FARC con francotiradores o minas que ataquen a nuestros policías y soldados, o a los civiles que erradican el cultivo de la coca. Tenemos una oportunidad única de encontrar una solución estructural a un problema que Colombia ha tenido durante los últimos 40 años. Ahora, si alguien es acusado de narcotráfico para beneficio propio, no gozará de ningún beneficio por parte de la justicia transicional.

P: ¿Cree que logrará un acuerdo con la guerrilla del ELN antes del final de su mandato?

R: Eso espero. Estamos abiertos, ellos saben lo que hemos negociado con las FARC. El tren de la historia se está moviendo y ellos saltan adentro o no, pero por supuesto espero que lo hagan. No tienen futuro, saben que militarmente están en una posición muy defensiva, son una guerrilla muy pequeña comparada con las FARC y espero que entenderán que ha llegado la hora.
 

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