Evo Morales viaja a China para relanzar su estratégica relación comercial
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Después de su escala en el Kremlin, Evo Morales vuela hacia China para realizar una visita oficial, entre el 19 y 20 de junio, y dialogar con su homólogo Xi Jinping.
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El gran tema a tratar será el fortalecimiento de la relación comercial entre ambos países. Una materia que no ha despegado del todo y que aún tiene lastres en la balanza comercial. China le compra muy poco a Bolivia. Evo Morales desea buscar soluciones.
En Asia se prevé la discusión a fondo de dos temas: dialogar sobre los préstamos otorgados por la República Popular China a Bolivia, su renegociación y la posible apertura de nuevas líneas de crédito. Evo Morales siempre ha evitado pedir dinero a los órganos financieros ligados a Washington como el Fondo Monetario Internacional. En ese sentido, China es su fuente de crédito más importante.
Sin embargo, el politólogo y exparlamentario, Carlos Börth, explica que el presidente Evo Morales puede poner en riesgo la soberanía económica del país si persiste en su intención de buscar créditos con China. A su juicio, la economía boliviana está al límite y tendría un gran lastre en el futuro si accede al crédito.
El otro gran tema es la balanza comercial. Actualmente China es su mayor socio de importación, su segundo socio comercial y su proveedor bilateral más importante. Las inversiones chinas se reflejan en 60 empresas instaladas en proyectos estratégicos como la minería, la energía y los hidrocarburos. Sin embargo, pese a los esfuerzos, esto no sería suficiente.
La Paz reclama que compró cerca de 1.696 millones de dólares, pero Pekín sólo adquirió productos por 480 millones. Carlos Börth opina que Evo Morales debe mostrar su voluntad política para reequilibrar la balanza.
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Si Evo Morales necesita una ayuda económica de China, ¿qué quiere el gigante asiático de los altiplánicos? El analista político William Bascopé sostiene que para Pekín la relación comercial trasciende en un interés geoestratégico.
Con gobiernos de derechas en Colombia, Brasil, Perú, Chile y Argentina, Bolivia se convierte en el destino perfecto para entrar con más confianza geopolítica, posicionarse en temas energéticos e incluso, a largo plazo, tener una supervisión militar en América del Sur.
El viaje de Evo Morales por Asia ha sido ampliamente crítica en Bolivia, pues la población y los medios indican que el mandatario voló hacia ese lado del mundo porque tampoco quería perderse la inauguración del Mundial Rusia 2018.
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