El escultor venezolano Luis Millé muestra sus “tensometrías” en la Galeria Denise René de Paris
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La Galeria Denise René de París acaba de inaugurar la exposición Art Construit Latino-Américain, nouvelles propositions, en la que quiere dar a conocer en Europa el trabajo de varios artistas latinoamericanos, cuyas carreras en el arte llamado constructivo o geométrico se han desarrollado esencialmente en América Latina.Entre los artistas destaca el escultor venezolano Luis Millé quien presenta dos grandes instalaciones y 8 piezas en pequeño formato, que el llama “tensometrías en las que replantea el papel de la escultura en el espacio.
Luis Millé nace en Caracas en 1967 donde estudia en la Escuela de Artes Visuales Cristóbal Rojas.
La geometría flexible de Luis Millé
Según confiesa el porpio Millé, su trabajo es un proceso de investigación sobre la fenomenología del espacio, todo acontecimiento dentro del mismo que involucre lo flexible, expansivo, intangible y lo activo-pasivo, ha sido un credo en todo el desarrollo de la obra de Luis Millé desde sus inicios como escultor, 1998, fecha de inicio de sus exposiciones individuales y colectivas, a la actualidad de su presente.
Al definir su obra bajo conceptos de espacio flexible, expansivo, intangible y activo-pasivo, el artista reflexiona sobre una categoría de espacio que trasciende el espacio-plano rígido de los códigos constructivistas, proponiendo una “representación del espacio” a partir de la forma geométrica que lo ocupa y la relación entre el espectador que lo asimila.
La relación del “objeto”, como ente físico y activo, con el entorno, crea una realidad espacial cargada de contenidos, siendo uno de ellos de carácter ontológico, al ser el espectador el que definitivamente contribuye a conferir significados a la realidad espacial creada.
Para que la obra de Millé cumpla su misión plástica, es importante el lugar- receptor dónde se le ubique. Las atmósferas y elementos circundantes definen sus posibilidades de expresarse en libertad para extenderse o recogerse, tanto física como visual y conceptual. Así demanda de tratamiento especial para que las líneas y ángulos rectos del cuerpo geométrico, se orienten físicamente, replegándose o expandiéndose, en una acción creadora de significados abstractos, universales e intemporales.
Es casi la compulsión arquitectónica del objeto que se desarrolla y anima el espacio físico, lo que problematiza el concepto de abstracción, al presentarse el cuerpo de la pieza como una articulación de significados en la correspondencia del interior con el exterior, de lo vacío con lo lleno y de lo visible con lo no visible.
En este sentido el espacio de la obra, que hemos definido como flexible, adquiere un carácter eidético en cuanto al universo de los conceptos representacionales de la forma geométrica.
La escultura de Millé es un cuerpo que se comporta en el espacio como ente activo y dinámico, y cuya orientación en perspectiva, se multiplica a medida que se desarrolla como una geometría flexible que propone realidades plásticas a las que el espectador está invitado a ser y a percibir, tanto existencial como espiritualmente.
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