Saltar al contenido principal
Carrusel de las Artes

Monumentos en busca de ayuda financiera

Primera modificación:

Varios sitios turísticos y monumentos franceses permitirán al público hacer una donación de dos euros que serán destinados a la restauración y conservación.

Anuncios

Francia sigue siendo el país más visitado del mundo con más de 84 millones de turistas que vienen cada año atraídos por sus joyas arquitectónicas, museos y monumentos. Un conjunto patrimonial que necesita una conservación permanente, muy costosa y especializada.

Por ello, el Centro de Monumentos Nacionales y la Fundación del Patrimonio apelan a la generosidad del público instalando unos dispositivos electrónicos que permitirán a quien lo desee hacer una contribución modesta, de dos euros, para la restauración de los lugares históricos. La donación puede hacerse con una tarjeta de crédito. El donante coloca la tarjeta sobre el lector y muy rápidamente la máquina registra la contribución de dos euros.

“Es un dispositivo nuevo, de donación sin contacto. Es una manera de hacer que los visitantes de museo o un monumento se vuelvan actores de su restauración y contribución. El Estado seguirá asumiendo la carga de financiera que suponen todos los monumentos de Francia. Pero ahora el público también puede participar pues finalmente, el patrimonio es de todos”, aseguró a RFI Philippe Bélaval, director del Centro de Monumentos Nacionales de Francia.

Este proyecto necesitó la participación de varios entes, no solo del Estado. También estuvieron el Grupo BPCE y la empresa Visa así como HeoH. La iniciativa fue apadrinada por el presentador de radio y televisión Stéphane Bern, un conocido defensor del patrimonio arquitectónico y cultural de Francia.

“El patrimonio es el último tesoro que nos queda, es el petróleo de Francia. El día que no tengamos más ese museo y esos jardines a cielo abierto, solo nos quedarán nuestros ojos para llorar. La única industria no deslocalizable y rentable en Francia es el patrimonio. Un estudio que hicieron los ministerios de la cultura y de la economía demostró que cada euro invertido en el patrimonio genera 20 euros. Dos euros es el precio de un caramelo. Dar dos euros para un lugar que lo necesita significa que ese lugar es especial, que se tiene ganas de participar, que es algo común a todos y que nos pertenece”, explicó Stéphane Bern durante la presentación del proyecto.

Varios monumentos ya cuentan con este dispositivo, como la Abadía del Monte Saint-Michel, la ciudadela de Carcasona o el Palacio de Fontainbleau y en los próximos meses se extenderá a otros monumentos franceses.

Donación sin contacto (en francés).

Boletín de noticiasNoticias internacionales esenciales todas las mañanas

Siga toda la actualidad internacional descargando la aplicación RFI

Ver los episodios restantes
Página no encontrada

El contenido que solicitó no existe o ya no está disponible.