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Carrusel de las Artes

‘Chez nous’, una película política contra el Frente Nacional

Primera modificación:

Chez nous (nuestra casa), la última película del director belga instalado en Francia Lucas Belvaux, cuenta la seducción y desilusión que suscita la extrema derecha en una habitante del Norte de Francia.

Fotograma de 'Chez nous', de Lucas Belvaux.
Fotograma de 'Chez nous', de Lucas Belvaux. Jean Claude LOTHER - Synecdoche Artémis Productions
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Lo que propone el belga Lucas Belvaux con su nueva película Chez nous es un cine político. El filme, que salió deliberadamente en plena campaña presidencial en Francia, muestra cómo una joven enfermera del norte del país, hija de un sindicalista de izquierda, se deja seducir por el discurso de un partido de extrema derecha que se asemeja al verdadero Frente Nacional.

De una familia de mineros y metalúrgicos, Pauline, la heroína, es una mujer generosa y valiente. Cada día comprueba en las casas de sus pacientes las dificultades sociales que azotan la cuenca minera del norte de Francia. Una zona donde se ha afincado el partido de la ultra derechista Marine Le Pen en los últimos años.

Un partido "fascista"

El director Lucas Belvaux explica que “en la película, no doy mi opinión. Hago una suerte de retrato, bastante preciso y justo, de lo que es este partido, su funcionamiento, su discurso. No exagero nada, al contrario. La realidad es más fuerte de lo que muestro. Lo hice así porque me quería dirigir a los electores de buena fe, es decir a quienes creen realmente que están votando por un partido cercano al pueblo, a las clases populares, los trabajadores. Y no, el Frente Nacional no es el partido de los obreros o de los más pobres. Es un partido de esencia fascista, con una ideología muy violenta”.

>Escuche la versión audio de la entrevista haciendo clic arriba en la foto principal arriba.

Catherine Jacob, la actriz que interpreta a la líder del partido en la película, ostenta una melena rubia y un discurso populista muy similares a Marine Le Pen. Es rodeada de consejeros formados en las escuelas parisinas de la élite. Su representante local en el pueblo donde se desarrolla la historia es un adinerado médico.

Sin ser un panfleto contra el Frente Nacional, la ficción de Belvaux, muy documentada, busca “desmaquillar” el partido de extrema derecha, como dice el productor. Demuestra cómo, en los últimos diez años, el Frente Nacional ha ido limpiando su imagen, lijando su vocabulario y cambiando el atuendo de los ex miembros de grupos neonazis y nacionalistas presentes en sus filas.

“Este partido ya no se presenta como xenófobo, racista o antisemita. Ya entendieron que existe el famoso techo de cristal y que la población francesa no acepta las ideas que expresaban antes. Cuando se dieron cuenta de eso, empezaron a trabajar para parecer diferente. Por ejemplo han cambiado el vocabulario: ya no dicen ‘preferencia nacional’, ni que son anti árabes... Dicen que no se puede asimilar a los musulmanes porque el islam es incompatible con la República. ¡Es falso! Francia y Europa han integrado a generaciones de musulmanes que no causaron ningún problema.
Pero así hablan ahora y ese discurso es mejor aceptado, en particular después de los atentados y de la llegada del grupo Estado Islámico. Por eso hay que desmontar todo este sistema”, cuenta el director.

La desilusión de la heroína del filme cuando descubre los lazos del partido -por el que aceptó ser candidata a alcaldesa- con organizaciones xenófobas y violentas permite al director hablar de las numerosas defecciones que ha sufrido el verdadero partido ultraderechista en los últimos años.

Reacción furiosa de los ejecutivos del Frente Nacional

“Estudié muchísimo para hacer esta película. Quería contar la verdad y que no se me pudiera atacar ni sobre los detalles. Algo divertido sobre esta campaña de reclutamiento a todos los niveles que llevó a cabo el Frente Nacional es que, dos años después, un 28% de los representantes locales que tenían se han ido. Es muchísimo. De los 1.500 representantes electos que tienen en toda Francia, 400 se fueron. Nunca se había visto tal hemorragia en la política francesa. Y eso suscita preguntas sobre el compromiso de estas nuevas figuras, sobre lo que encuentran en las secciones del partido. Hay testimonios muy interesantes al respecto”, prosigue Lucas Belvaux.

Una película “escandalosa”, según los líderes del Frente Nacional. Uno de ellos incluso calificó al equipo del filme de “imitadores de Goebbels”. Reacciones que han suscitado el interés de la prensa internacional en un contexto en el que Marine Le Pen sigue encabezando los sondeos para la primera vuelta de las presidenciales.
 

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