Los presos de ETA reconocen el dolor causado
Aseguran que a partir de ahora utilizarán vías políticas y democráticas. En un comunicado conocido en la tarde del sábado, aceptan un proceso "individual y escalonado". Las asociaciones de víctimas se muestran críticas con el anuncio y lo califican de "ejercicio de disimulo"
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El colectivo de reclusos de ETA (EPPK) ha reconocido este sábado "el sufrimiento y daño multilateral generados" por sus acciones violentas y ha anunciado estar dispuesto a estudiar la posibilidad de que "su vuelta a casa" se produzca "de manera escalonada, mediante compromisos individuales y en un tiempo prudencial". Así lo han afirmado mediante un comunicado leído por la presa de ETA Marixol Iparraguirre.
Al contrario de otros comunicados en los que se abogaba por la amnistía para los presos, en esta ocasión afirman que "podrían" aceptar que su proceso de excarcelación se efectúe "utilizando cauces legales aún cuando ello lleva implícitamente aceptar sus condenas".
Asumen igualmente la "responsabilidad sobre las consecuencias derivadas de su actividad política en el conflicto" y hacen un llamamiento a la ciudadanía, agentes sociales y partidos políticos para "buscar un consenso" que posibilite su regreso a casa "que no ponga en cuestión su dignidad política".
La presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), Ángeles Pedraza, ha señalado sin embargo que este nuevo paso es una estrategia para quedar impunes, exigiendo al mismo tiempo que si admiten el daño causado, asuman de forma rotunda que deben cumplir íntegramente las condenas. En la misma línea se ha expresado el Colectivo de Víctimas del Terrorismo en el País Vasco (COVITE), que considera el texto "un ejercicio de disimulo" con el que se reconoce "el daño causado mientras se justifican décadas de asesinatos".
El anuncio se hace público dos años y dos meses después de que la banda decidiera dejar las armas, supone un significativo salto en las posiciones del monolítico bloque de presos de ETA -unos 600 entre España y Francia, fundamentalmente-, que hasta el momento rechazaba aceptar la política penitenciaria
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