Saltar al contenido principal
RELIGION

El papa busca en Suecia la reconciliación con los protestantes

El papa Francisco llegó el lunes por la mañana a Suecia, donde celebrará, junto a la comunidad protestante, el aniversario 500 de la Reforma de Martín Lutero, en una visita con la que busca consolidar medio siglo de esfuerzos en aras de la reconciliación. "Es un viaje importante" desde el punto de vista ecuménico, declaró el papa.

A su llegada a Suecia, el papa fue recibido por el primer ministro Stefan Löfven.
A su llegada a Suecia, el papa fue recibido por el primer ministro Stefan Löfven. Emil Langvad/TT NEWS AGENCY/via Reuters
Anuncios

El Pontífice fue recibido a su llegada por el primer ministro, Stefan Löfven, y la ministra de Cultura y Democracia, Alice Bah-Kunke, y por otras autoridades y miembros de la Federación Luterana Internacional, que organizaron la conmemoración.

Mientras que teólogos luteranos y católicos prosiguen con su lento diálogo doctrinal iniciado hace 50 años, el papa pretende acercar a los 1.200 millones de creyentes católicos a sus hermanos protestantes.

El viaje de Francisco a Suecia no es un hecho repentino y aislado sino el corolario de un proceso de diálogo ecuménico iniciado en la posguerra, en especial a partir del Concilio Vaticano II.

"El diálogo con los luteranos fue el primer diálogo bilateral que la Iglesia inició enseguida después del Concilio (Vaticano II) en 1967 -recordó el cardenal Kurt Koch, presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos-, lo que debemos agradecer, porque hemos podido descubrir todo lo que hay de común entre luteranos y católicos".

"No celebramos tanto los 500 años de la reforma protestante, como los 50 años del comienzo del diálogo entre luteranos y católicos", aclaró Koch.

 

El origen de la separación

Aunque se considera que el inicio de la Reforma fue el 31 de octubre de 1517, día en que el monje agustino Martín Lutero dio a conocer los puntos que quería debatir públicamente, fijándolas en la puerta de la Iglesia del Palacio de Wittenberg, al sur de Berlín (las famosas 95 tesis), será recién dos años después cuando Lutero formulará su doctrina de la justificación por la sola fe.

Como monje agustino y como teólogo, Lutero se sentía indigno por la práctica de las penitencias. La inquietud que lo torturaba era cómo diferenciar la contrición, el arrepentimiento sincero, del miedo al infierno. Era un contexto en el que la fe se había mercantilizado al extremo, donde a los vivos y a los muertos se les ofrecía acortar el tiempo del purgatorio y ganar el cielo mediante la venta tarifada de indulgencias.
Lutero insistía en la gratuidad de la salvación.

Lutero no se proponía crear una nueva iglesia sino debatir sobre esas cuestiones y reformar las prácticas que le parecían condenables y alejadas del mensaje del Evangelio. Pero ese propósito le valió una amonestación del Papa y, más tarde, ante su negativa a desdecirse, la excomunión. Tal ruptura provocó cruentos enfrentamientos en el seno de la Iglesia en las décadas posteriores.

Las distancias en la forma de comprender la teología determinaría diferencias considerables a lo largo de los años. La Iglesia del país escandinavo autoriza la ordenación de mujeres desde 1960, celebra matrimonios entre personas del mismo sexo desde 2009 y nombró a una obispa lesbiana en Estocolmo, algo impensable para la Iglesia Católica. Los protestantes no rinden culto a la virgen María ni a los santos, Dios es el único que puede ser venerado, ni tampoco reconocen el principio de jerarquía de la Iglesia romana ni la autoridad del papa.

 

Francisco en Suecia

La visita del papa al país escandinavo (donde los católicos son sólo cerca de 119.000 entre los 10 millones de habitantes, y la mayoría son inmigrantes) despertó el entusiasmo de los que defienden la unidad de los cristianos, pero también puso en guardia a los más conservadores.

"Lutero dio un gran paso para poner a Dios en manos del pueblo", subrayó el papa sobre el reformador que tradujo la biblia al alemán, en una entrevista publicada el viernes en dos revistas jesuitas de Suecia y del Vaticano.

Por su lado, el cardenal alemán Gerhard Ludwig Müller, encargado de proteger el dogma en el Vaticano, consideró que no existía "ninguna razón para celebrar" la Reforma, que "llevó a la ruptura del cristianismo occidental".

Los actos programados el lunes en el sur de Suecia fueron denominados "conmemoración común" y no "celebración".

El lunes por la tarde Francisco se reunirá con la familia real sueca en el palacio real de Kungshuset en Lund, y en la catedral luterana celebrará una oración ecuménica. La homilía del papa será estudiada minuciosamente, así como la del obispo luterano Munib Yunan, palestino y presidente de la Federación Luterana Mundial. Junto al papa, se encontrará la primada de la Iglesia Luterana de Suecia, Antje Jackelen, primera mujer en ocupar el prestigioso púlpito del arzobispo de la catedral de Uppsala.

Más tarde el mismo lunes, en el Palacio de Deportes, el Malmö-Arena, el Papa asistirá a una concentración ecuménica cuyo tema central será la crisis en Siria. El obispo de Alepo intervendrá allí y los ingresos de los 10.000 boletos de entrada se destinarán a ayudar a jóvenes refugiados sirios.

Se prevé que la multitud participe en un rezo por el fin de la guerra de Siria, que se secundará en otras ciudades del mundo.

El martes, día de la festividad de Todos los Santos para los católicos, Francisco celebrará la misa en el estadio Swedbank de Malmö, ante una amplia comunidad de inmigrantes.

 

Boletín de noticiasNoticias internacionales esenciales todas las mañanas

Siga toda la actualidad internacional descargando la aplicación RFI

Compartir :
Página no encontrada

El contenido que solicitó no existe o ya no está disponible.