Francia pierde ante China y vuelven las dudas

Tras el optimismo generado por la esperanzadora victoria de hace diez días contra Costa Rica, la selección francesa ha vuelto a decaer. Ya el magro empate del domingo ante Túnez había mostrado que el nuevo sistema de juego decidido por Raymond Domenech no era sinónimo de victoria. La derrota este viernes ante China (1-0) vuelve a encender la alarma en los "Bleus".

William Gallas y su inquietud. A una semana de su debut contra Uruguay, Francia no encuentra la receta de la victoria. AFP

Antes del partido contra China, Raymond Domenech dio una respuesta de las suyas a un periodista inquieto por el estado físico del defensor William Gallas: "Está mucho mejor que si estuviese peor, pero mucho menos bien que si fuera mejor". Como de costumbre, el técnico francés parece hablar en chino cuando debe afrontar a los odiados periodistas. Pero por lo visto, el chino tapoco se le da bien, al menos el fútbol chino. El último partido de Francia antes de viajar a Sudáfrica tenía que ser una fiesta y una manera de abordar con serenidad el Mundial. Fiesta hubo, ya que los habitantes de la isla de la Reunión, pequeño departamente francés del Océano Índico, recibieron a los jugadores como reyes. Pero la serenidad no estuvo en la cita...

Lo único positivo de esta derrota ante una selección de escaso nivel es que Francia dominó la mayor parte del encuentro y supo crearse numerosas ocasiones. Las notas negativas son mucho más numerosas, comenzando por la ineficacia de los delanteros galos. Nicolas Anelka nunca se mostró cómodo en el rol de centrodelantero que parece reservarle el nuevo esquema táctico de Domenech, un 4-3-3. Ironía del destino, el jugador más peligroso de los "Bleus" fue el maltrecho William Gallas, autor de un gol anulado por fuera de juego y de cuatro ocasiones claras.

Tampoco mejoró el equilibrio ofensivo entre un sector derecho inoperante con Sydney Gavou y un sector izquierdo mucho más activo gracias al trabajo de Florent Malouda y de Frank Ribery. Y ni siquiera el arquero Hugo Lloris, uno de los baluartes de la selección, se mostró irreprochable. Un error suyo permitió al chino Zhuoxiang marcar de tiro libre el único gol de la velada.

Conclusión: Francia concluye de manera medriocre su serie de tres partidos de preparación, con una victoria (contra Costa Rica), un empate (contra Túnez) y una derrota (ante China). Una selección francesa que llega a Sudáfrica sin estar lista para arrancar con buen pie este Mundial. Le quedan seis días para corregir sus lagunas...