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Francia - Estados Unidos

Estados Unidos espió a los tres últimos presidentes franceses

Documentos obtenidos por WikiLeaks y publicados por la prensa francesa revelan que los servicios secretos estadounidense escucharon las conversaciones de Jacques Chirac, Nicolas Sarkozy y François Hollande. París convoca al embajador estadounidense y advierte que no tolerará “ninguna acción que ponga en riesgo su seguridad”.

"Por lo menos piensan que somos tan importantes como los alemanes", dicen los presidentes de Francia aludiendo al espionaje a la canciller alemana.
"Por lo menos piensan que somos tan importantes como los alemanes", dicen los presidentes de Francia aludiendo al espionaje a la canciller alemana. Ilustración del documento de WikiLeaks.
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Los tres últimos jefes de Estado de Francia fueron espiados por Estados Unidos entre 2006 y 2012, informaron en la noche del viernes el diario Libération y el portal de noticias Médiapart, basándose en documentos de WikiLeaks.

Las escuchas, dirigidas por la agencia estadounidense NSA, tuvieron como blanco las presidencias de Jacques Chirac, Nicolas Sarkozy y François Hollande.

La cancillería francesa reaccionó en la mañana del miércoles convocando a la embajadora de Estados Unidos en París. Entretanto, Hollande presidió una reunión de urgencia con los principales ministros del gobierno, mandos militares y responsables de los servicios de inteligencia.

Por su parte, el portavoz del gobierno, Stéphane Le Foll fustigó el espionaje, subrayando que era algo "inaceptable entre aliados".

"Lo que pasó no es aceptable pero no por eso vamos a entrar en una crisis", Matizó en declaraciones a la televisión Le Foll, también ministro de Agricultura.

Desde Washington, la Casa Blanca se limitó a afirmar que no espiaba a Hollande.

"No tenemos como objetivo ni tendremos como objetivo las comunicaciones del presidente Hollande", sostuvo Ned Proce, portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, quien no dio precisiones sobre las operaciones que pudieron tener lugar en el pasado.

Las revelaciones

Estas revelaciones de WikiLeaks no contienen verdaderas primicias ni tampoco son un sopresa, sobre todo después de que la canciller Angela Merkel fuese víctima de estas prácticas por parte de los servicios de inteligencia norteamericanos.

La prensa francesa pone sobre el tapete  cinco informes, clasificados "Top-Secret", de la agencia de la NSA, basados en "intercepciones de comunicaciones". Estaban destinados a la "inteligencia" estadounidense y a responsables de la NSA, según el diario Libération.

La más reciente de de las escuchas data del 22 de mayo de 2012, unos días después de la entrada en funciones de François Hollande. El mandatario aparece preocupado por la perspectiva de la salida de Grecia de la zona euro.

"Hollande está muy preocupado por Grecia", escribe la NSA, que afirma también que el jefe del Estado se reunió con la canciller alemana Angela Merkel en Berlín el mismo día de su investidura, el 15 de mayo de 2012. De su homóloga dice que estaba "obnubilada por el 'pacto presupuestario' y sobre todo por Grecia a la que dejó caer, según él, y no hará nada".

En cuanto a la presidencia francesa anterior, Sarkozy apunta que tras la crisis financiera de 2008, el mandatario "cree que Washington tiene en cuenta algunos de sus consejos".

"Sarkozy se ve como el único que puede resolver la crisis financiera mundial", dice la agencia estadounidense, que afirma que el ex presidente francés pensaba llamar al presidente ruso de la época, Dimitri Medvedev, para "una eventual iniciativa común" en Oriente Medio, pero "sin Estados Unidos".

De la era Chirac, aparece la poca confianza que éste tenía en su canciller de entonces Philippe Douste-Blazy, por juzgar que tenía "propensión (...) a realizar declaraciones inexactas e inoportunas".

 

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