Euro 2016: Francia frente a su destino
Los “Bleus” se enfrentan este jueves 7 de julio en Marsella al ogro alemán. Dos años después de ser eliminados contra la Mannschaft en Brasil, la selección dirigida por Didier Deschamps sueña con la revancha.
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Después de la euforia de las victorias contra Irlanda e Islandia, Francia enfrenta este jueves a un rival de mucha mayor envergadura: Alemania. Veinticuatro meses después de los cuartos de final del Mundial de Brasil, los Bleus conquistaron el derecho a una revancha en estadio Vélodrome de Marsella enardecido.
Desde un punto de vista histórico y estadístico, Francia no tiene la menor posibilidad de ganar. Ya sea en el campeonato europeo o en un mundial, los de azul no vencen a los alemanes desde 1958, en los que cabe destacar las derrotas sufridas en las Copas del Mundo de 1982, 1986 y 2014. Por primera vez, Francia llega a las últimas instancias de un torneo mayor, cuando los alemanes están en semifinales por sexta vez desde 2006.
A esto se añade que de las seis semifinales jugadas desde 1972 frente al país organizador, se impusieron en las seis ocasiones. Son cifras elocuentes, pero que no impresionan al seleccionador francés Didier Deschamps. “Es evidente que no podemos rivalizar con lo vivido por este equipo alemán: la experiencia, el muy alto nivel, el número de selecciones, de semifinales, de finales jugadas. Okey. ¡Pero nosotros estamos aquí y vamos a dar el máximo!”, afirmó.
Los Bleus de Deschamps quieren creer en la victoria. Primero porque juegan de locales, en una cancha, el Vélodrome, que debería hervir. También porque volvieron a reencontrarse con el fútbol frente a Islandia en cuartos de final. “Tenemos ganas de la historia continúe. Estaremos listos”, asegura el capitán de los Bleus, Hugo Lloris. “Hay que respetar a este equipo, es el actual campeón del mundo, pero no hay que entrar a la cancha con demasiada timidez. Al contrario, vamos a tener que ir a combatir, listos para hacer esfuerzos. Haremos todo para lograr una hazaña”, agrega.
Este jueves por la noche, Alemania, a priori favorita en todos los aspectos, llegará sin embargo seriamente disminuida. El defensor central Mats Hummels ha sido suspendido, mientras que Khedira en el medio y Gómez se encuentran lesionados.
Llevados por un Antoine Griezmann con todas las pilas, este equipo de Francia completo puede aprovechar la ocasión.
Marsella, a la altura del acontecimiento
Para este choque, los Bleus cuentan con los hinchas franceses. El miércoles, ya podía sentirse el fervor popular que genera esta semifinal en la ciudad portuaria. Bajo un sol de plomo, los hombres de Didier Deschamps fueron recibidos por simpatizantes que los esperaban en la puerta del hotel.
Vestidos y pintados de azul, rojo y blanco, un centenar de personas llegaron para demostrar su cariño por el seleccionado tricolor. Familias, grupos de amigos, pero también muchos niños se han desplazado para ver a los jugadores. Hasta el gallo Balthazar, la mascota de los Bleus, llegó bajo el brazo de su amo, Clément d’Antibes. “Es mi sexto y último campeonato de Europa. Me gustaría terminar por lo alto el 10 de julio”, anuncia este hincha que ya ha acompañado a la selección en 231 partidos.
Un poco más lejos, Dominik se disfrazó de copa de Europa azul, blanca y roja gigante con un gallo de peluche encima del sombrero. “Tengo la Eurocopa en la piel”, sonríe el hincha. “Había que hacer algo original. ¡Así que fueron tres meses de reflexión y 30 días de trabajo para el disfraz!”, añade.
“Estoy muy nerviosa, no como más, estoy demasiado estresada”, explica Agnès, que se puso plumas indias con los colores del combinado francés.
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