La reseña de la prensa francesa del 31 de agosto de 2016

El ahora exministro de Economía francés, Emmanuel Macron. REUTERS/Philippe Wojazer

Con un titular que habla del "descenso al infierno de Dilma Rousseff", Le Figaro publica un largo reportaje sobre el proceso de destitución de la presidenta brasileña y sobre su defensa ante el Senado este lunes. Dice el periódico que Dilma asumió una actitud humilde poco frecuente en ella y que fue de una sinceridad sorprendente. "No escondió ni sus heridas ni sus errores y se defendió con pedagogía, sin ninguna animosidad, pese a las traiciones que describió y a sabiendas de que tiene pocas chances de escapar a la destitución".

Le Figaro subraya que los senadores la interrogaron no tanto sobre las maniobras presupuestales de las que la acusan, sino sobre la crisis económica y ella dijo haber sido víctima de un boicot de parte del Congreso que le impidió tomar las medidas adecuadas. El periódico recuerda que, en efecto, en enero de 2015 Dilma Rousseff quiso poner en marcha una política de austeridad como la que propone actualmente el presidente interino Michel Temer y el Congreso en ese momento rechazó las mismas medidas que ahora está dispuesto a aprobar. Por otra parte Le Figaro comenta que el proceso de destitución fue urdido por el expresidente de la Cámara Eduardo Cunha, hoy apartado del cargo y acusado de corrupción, lavado de dinero y evasión de divisas. Urdido por Cunha y "apoyado abiertamente por la élite económica del país", afirma el matutino conservador francés.

Le Monde también dedica un largo artículo a la defensa de Dilma Rousseff ante el Senado pero advierte que los brasileños están cansados después de tantos meses de crisis política, cansados de ese interminable folletín de la destitución que ya no les interesa y sólo quieren pasar la página de una vez por todas.

Pero el personaje del día en la prensa francesa no es Dilma Rousseff sino el hoy exministro de Economía francés Emmanuel Macron quien aparece en todas las portadas de los diarios. Emmanuel Macron renunció ayer a su cargo y si se habla tanto de su decisión de dejar el gobierno es porque el joven exministro de 38 años tiene ambiciones presidenciales. Así lo anuncia La Croix, asegurando que Macron está poniendo los cimientos de una posible candidatura para 2017. Libération sostiene que Macron sólo será candidato en caso de que el presidente Hollande no se presente. Le Figaro por el contrario piensa que la renuncia de Macron es una manera de torpedear al presidente, salvando su pellejo al saltar de un barco que naufraga. "Al saltar del Titanic, Macron acaba con la ambigüedad", escribe el editorialista de Le Figaro pero agrega que en el camino hacia la presidencia el joven y ambicioso exministro tiene todavía muchas cosas que probar.

El editorial de Le Monde es sobre Colombia y el acuerdo de paz con las FARC. El texto subraya la importancia de haber logrado un acuerdo después de 52 años de conflicto armado pero se concentra sobre todo en el plebiscito del 2 de octubre en el que los electores colombianos deberán refrendar o rechazar ese acuerdo de paz. "La victoria del ‘sí’ no está garantizada", comenta el vespertino y explica que el expresidente Uribe está haciendo campaña activa por el “no” con el argumento de que es posible seguir negociando y arrancar más concesiones a las FARC. "Uribe lleva a sus compatriotas por un camino peligroso porque nada garantiza que los dirigentes de las FARC estén dispuestos a volver a la mesa de negociaciones", escribe el editorialista de Le Monde opinando que lo más probable que es que vuelvan a tomar las armas, y termina diciendo que "por el bien de los colombianos y del resto de América Latina, es deseable que el 2 de octubre gane el ‘sí’".

Por otra parte, Le Monde llama la atención sobre el acuerdo climático firmado en diciembre pasado aquí en París durante la COP21. Para que entre en vigor, ese acuerdo tiene que ser ratificado por 55 Estados que representen el 55% de las emisiones de gases contaminantes y estamos a sólo 2% de ratificaciones. Ninguno de los veinte países más ricos del planeta lo ha ratificado. Francia ya lo hizo pero está esperando que lo ratifiquen los demás socios de la Unión Europea. "El clima se recalienta cada vez más y el tiempo apremia", advierte en Le Monde el excanciller francés Laurent Fabius quien presidió la COP21.