La reseña de la prensa francesa del 13 de septiembre de 2016

El presidente argentino Mauricio Macri, el pasado 8 de agosto de 2016. REUTERS/Agustin Marcarian

La prensa francesa evoca la situación en Argentina y Brasil, dos países en recesión económica. “El regreso de los inversionistas a la Argentina se demora”, titula Le Figaro. “Las empresas extranjeras se muestran muy prudentes a pesar de que la tercera economía del continente ha recuperado la confianza de los inversionistas”, agrega el diario. Una fuente citada por Le Figaro explica de manera irónica que “nueve meses de presidencia de Macri no son suficientes para cambiar la mala reputación de Argentina. La política de confiscaciones de la pareja Kirchner, las expropiaciones y las nacionalizaciones, fueron socavando el ánimo de las empresas extranjeras”. La economía argentina está en “recesión”. Hay señales negativas como un déficit de demanda interna y tensiones políticas. Pero el discurso del gobierno Macri es optimista, como podrán constatarlo 1.500 dirigentes empresariales que asisten a un foro organizado en Buenos Aires para atraer proyectos internacionales. El diario subraya que “el gobierno espera que pronto comiencen a verse los frutos de algunas reformas”. Entre otras, el fin del control de capitales y de las restricciones a las importaciones y las exportaciones así como la unificación de los tipos de cambio”. Argentina tiene además un retraso en infraestructuras, particularmente en transporte y energía, lo que constituye una gran oportunidad para los inversionistas extranjeros.

Brasil es otra de las grandes economías del continente en medio de turbulencias. “El país enfrenta una recesión histórica”, escribe Le Monde, que consiguió entrevistar a Henrique Meirelles, ministro de Economía, y exdirector del Banco Central de Brasil. Meirelles también se muestra, por supuesto, optimista. “La recuperación será progresiva”, afirma. Meirelles fue confirmado en su cargo después de la destitución de Rousseff. El ministro defiende la austeridad, la cual considera “el primer paso para el crecimiento. La austeridad es una etapa necesaria para restablecer la confianza que permitirá reducir las tasas de interés, relanzar las inversiones, el consumo, el empleo”, escribe Le Monde. El vespertino no descarta que el ministro, a quien describe como “una fuerza tranquila”, logre llegar a la presidencia si es capaz de sacar a Brasil del “marasmo”. Pero el ministro también tiene detractores. “Meirelles está ejecutando el trabajo sucio de un gobierno que está al servicio de las élites”, dice un líder sindical citado por el diario. Varios economistas se sorprenden que el ministro no trate de cambiar el sistema fiscal brasileño “injusto y pesado”.

Los diarios franceses también escriben sobre la candidata presidencial demócrata, la cual está atravesando un mal momento, sin duda el más delicado de su campaña. Durante la ceremonia del 11 de septiembre, Hillary Clinton tuvo que retirarse a causa de un malestar. Las imágenes de la candidata tambaleando tomadas furtivamente por un asistente dieron la vuelta al mundo, especialmente en las redes sociales. Hasta aquí, nada anormal. El problema fue que, para explicar el incidente, el equipo de campaña dijo que fue a causa del calor. Ella misma, horas después, dijo que era un día espléndido y que se sentía muy bien. Pero ahora se sabe que dos días antes, Clinton ya había sido diagnosticada con neumonía, información que se mantuvo en secreto. De ahí que Libération escriba: “Lo que podría afectar la campaña de Clinton no son las inquietudes sobre su estado de salud, sino la falta de transparencia”. El diario se pregunta si Hillary “va a lograr recuperarse”, en referencia no sólo a su neumonía, sino a los perjuicios que este incidente ha causado en su campaña.

“Clinton de nuevo fragilizada por su falta de transparencia”, titula por su lado Les Echos. El diario económico afirma que a Clinton se le reprocha una vez más “su obsesión por el secreto”. Les Echos afirma que la prensa norteamericana no le perdona a Clinton haber esperado la difusión de las imágenes donde se la ve a punto de desmoronarse para revelar la existencia de la neumonía. A este incidente se agrega su desastrosa declaración sobre “la mitad de los electores” de Trump a los que calificó de “deplorables”. Le Monde escribe que estas declaraciones “incendiaron el debate electoral” y se pregunta si esta semana no constituye un giro en la campaña de Clinton.