La reseña de la prensa francesa del 10 de marzo de 2017
Primera modificación:
La encrucijada de la Unión Europea está en primera plana de Le Figaro. A dos semanas de las celebraciones para conmemorar los 60 años del Tratado de Roma, tratado fundador de la Unión Europea, el bloque está enfrentado a la inminente salida de Gran Bretaña y, lo que es peor, al peligro de desintegración, explica Le Figaro. Como cada vez que el proyecto europeo tambalea o se empantana, surge la idea de avanzar por pequeños grupos. Francia, Alemania, Italia y España quieren formar un núcleo duro para liderar la UE pero esa idea ha suscitado indignación en los países del este que se sienten marginados, comenta el periódico. Pero eso no es lo único que divide a los europeos. Desde hace dos años los países de Europa oriental rechazan la política migratoria y se niegan a aceptar las cuotas de inmigrantes impuestas por Bruselas, mientras que los países de Europa occidental se inquietan por la tendencia al autoritarismo en Polonia o en Hungría. En el plano económico también hay profundas divergencias, anota el diario conservador y agrega que la impresión es que "la sombra de la cortina de hierro que separaba a Europa en tiempos de la Guerra Fría, está resurgiendo y partiendo en dos simbólicamente a la Unión Europea". El último incidente que ilustra esas desavenencias fue la reelección del polaco Donald Tusk como presidente del Consejo Europeo contra la voluntad del gobierno polaco, precisa Le Figaro.
El matutino católico La Croix destaca en su portada la polémica desatada por la empresa de cementos franco-suiza LafargeHolcim que propuso sus servicios a Donald Trump para construir el muro en la frontera con México. La noticia provoca aquí en Francia una gran polémica: el presidente Hollande y el ministro de Asuntos Exteriores reaccionaron ayer criticando a la empresa y La Croix publica una entrevista con Cécile Renouard, una monja filósofa y economista. Ella afirma que el hecho de que una operación o un negocio sea legal, no implica necesariamente que sea legítimo y moralmente válido. En este caso estima que la oferta de Lafarge no es ética y que puede incluso afectar la reputación de la empresa que en días pasados fue acusada de financiar a los grupos armados en Siria y posiblemente al grupo Estado Islámico, para poder seguir haciendo negocios en medio del conflicto. "En ambos casos, las decisiones de Lafarge han sido guiadas por un solo principio: el de la actividad y la ganancia", comenta Cécile Renouard y agrega que es todo lo contrario de una empresa con responsabilidad social.
Otro tema muy comentado por la prensa este viernes es la humillante derrota del París Saint-Germain el miércoles por la noche en Barcelona. "Radiografía de un desastre", titula en primera plana Le Figaro. Dice que la "humillación" del miércoles ha hundido al club parisino en una crisis profunda. "Dirigentes, entrenador, jugadores, todos tienen parte de responsabilidad en ese naufragio histórico que va a dejar terribles secuelas", opina el matutino conservador. Pero agrega que los primeros responsables son los propietarios cataríes del club que no han entendido que no basta con inyectar centenares de millones de euros para ganar en Liga de Campeones. "Si los propietarios no saben reaccionar ante esta crisis, si no saben manejar la situación, el club parisino se hundirá irremediablemente en un hueco negro del que no podrá salir fácilmente", sentencia Le Figaro.
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