La reseña de la prensa francesa del 22 de agosto de 2017

Le Monde publica un reportaje titulado 'Caracas, capital de la angustia'. Reuters

Venezuela está en primera plana de Le Monde. El vespertino publica un reportaje titulado "Caracas, capital de la angustia" que empieza describiendo el ambiente que desmoralización que reina en la capital venezolana tras cuatro meses de manifestaciones que dejaron 125 víctimas. "Algunos habitantes lloran a sus muertos, otros observan incrédulos como el país se desliza hacia la dictadura mientras que la inseguridad y la debacle económica pesan sobre el ánimo de todos", comenta la enviada especial de Le Monde y subraya que el nivel de inseguridad es tal que cuando cae la noche la ciudad se muere. Sostiene que la preocupación es palpable incluso en los bastiones chavistas donde las familias están asfixiadas por el aumento de los precios y subraya el contraste con la forma de vida de algunos dirigentes que tienen lujosas mansiones como Tibisey Lucena, la presidenta del CNE cuya residencia, adquirida en 2015 y ubicada en el muy chic Country Club es custodiada día y noche por una docena de soldados de la guardia nacional.

Le Monde también dedica su editorial a Venezuela. Bajo el título "El país se hunde en la dictadura", el vespertino afirma que lo que ha ocurrido es un "golpe de estado institucional" encabezado por Nicolás Maduro. "Bajo Chávez Venezuela era una democracia populista e imperfecta pero ahora con Maduro se ha convertido en dictadura", escribe el editorialista y opina que a estas alturas el caso de Venezuela no puede seguir siendo un asunto puramente regional, que las Naciones Unidas y la Unión Europea tienen que presionar al régimen de Maduro y convencer a quienes lo apoyan que está en una encrucijada. Pero al mismo tiempo el editorialista advierte que los Estados Unidos deberían abstenerse de toda iniciativa unilateral como la amenaza de opción militar evocada recientemente por Trump "porque eso equivale a ofrecerle en bandeja de plata argumentos a Maduro contra el imperialismo yanqui".

Brasil también ocupa espacio destacado en las páginas de Le Monde y concretamente la gira que emprendió el expresidente Lula por el nordeste del país. "Lula, quien lanzó un recurso de de apelación tras su condena por corrupción está apostando por volver al poder", escribe el periódico y dice que la gira de tres semanas tiene como objetivo refrescar la memoria de la población sobre el legado del Partido de los Trabajadores que "contribuyó a a sacar al pueblo de la miseria, del hambre y la ignorancia". Pero el periódico se pregunta a renglón seguido si se trata realmente de un regreso o de una gira de despedida del expresidente. "Quizás ni el mismo Lula lo sabe", comenta Le Monde y agrega que probablemente esta es su última ronda de aplausos antes de salir del escenario y pasar la posta a su delfín, el ex alcalde de Sao Paulo Fernando Haddad.

Libération y La Croix dedican sus respectivas portadas al presidente Emmanuel Macron. Libération anuncia que los próximos diez días serán difíciles para el mandatario francés porque el gobierno va a presentar a los sindicatos las medidas para reformar el código laboral, medidas que van a ser adoptadas por ordenanzas y no por el Congreso. "Algunas de esas medidas crean fricciones y no se puede descartar un estallido de cólera social en las próximas semanas", sostiene el tabloide.

La Croix por su parte asegura que hasta ahora el presidente Macron se ha desempeñado muy bien, que el balance de sus primeros cien días de mandato es positivo pero que lo más duro está por venir. En cuanto a la reforma laboral, el matutino católico dice que es importante que el esfuerzo sea equitativamente compartido entre los asalariados y los empresarios y para que sea compartido habría que hacer de la lucha contra la evasión fiscal una prioridad.

Y por otra parte, el debut de Neymar en el PSG sigue dando mucho que hablar. El futbolista brasileño aparece en primera plana de Le Figaro, en el lugar más destacado de la primera plana, en una fotografía en la que parecería estar volando pero en realidad estaba celebrando su segundo gol del domingo en el partido contra Toulouse que terminó con un marcador de 6 a 2 a favor del PSG. El periódico asegura que el "radiante" debut de Neymar está haciendo las delicias de la afición francesa.