Emisario de la ONU no logra cese el fuego en Damasco
El mediador de la ONU para Siria, Staffan de Mistura, estaba en la capital siria para lograr un alto al fuego de algunas semanas en Alepo, en el norte del país. Había obtenido el envío de una delegación a esta zona para evaluar la situación. Pero la oposición militar y política rechazó su propuesta.
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"Rechazamos reunirnos con Staffan de Mistura si no es sobre la base de una solución global del drama sirio, que pasa por la marcha del presidente Bashar al-Asad y su estado mayor. Así como por el juicio a sus criminales de guerra", afirmó la Comisión de fuerzas de la revolución de Alepo echando abajo todo un proceso de negociación.
A mediados de febrero, Staffan de Mistura había afirmado que el régimen sirio estaba dispuesto a suspender los ataques aéreos y los disparos de artillería contra Alepo, la “ciudad mártir”. Y eso durante seis semanas. El mediador estaba entonces de regreso para concretar este alto el fuego localizado.
De Mistura se había entrevistado con Wallid Mouallem, ministro de Relaciones exteriores. Durante la reunión, logró un acuerdo para enviar una delegación a esta ciudad sin precisar una fecha.
Distrito test
Según el viceministro de Relaciones Exteriores sirio, Faisal Moqdad, el mediador propuso suspender las hostilidades en dos barrios de Alepo: Saladino y Seif al Dawla. El gobierno sirio quisiera comenzar por Saladino.
Se contemplaba un distrito test ya que una parte de estos dos sectores –situados en el sudoeste de la antigua capital económica– está controlada por las fuerzas del régimen y otra por los rebeldes, desde julio de 2012.
En un encuentro muy controvertido con parlamentarios franceses, el presidente sirio Bashar al Asad habí declarado su apoyo a la iniciativa de Mistura y a altos al fuego locales.
Rechazo
En Kilis, una localidad turca fronteriza con Siria, políticos y militares de la oposición, así como miembros de la sociedad civil habían reunido para anunciar su posición sobre la iniciativa.
La reunión de la oposición se concluyó con el rechazo de este cese el fuego parcial "que no satisface las demandas de los opositores".
El régimen sirio avanza con la ayuda del Hezbolá libanés
Mientras tanto, las fuerzas del régimen sirio apoyadas por el Hezbolá libanés progresaban este sábado en el sur de Siria. Al mismo tiempo, los yihadistas del Frente al Nosra se apoderaban de una base importante en el norte.
Además del apoyo del Hezbolá, el ejército sirio cuenta con consejeros de los guardianes de la revolución iraníes y milicianos chiitas iraquíes.
El objetivo militar es llegar hasta la línea de armisticio con Israel en la meseta del Golán y cortar la carretera a los rebeldes y al Frente al Nosra, el brazo sirio de Al Qaida.
Para ello el ejército sirio y el Hezbolá avanzan del este al oeste. Al Nosra controla una franja del territorio al lo largo de la frontera jordana. En el sur, los rebeldes y Al Nosra combaten juntos, pero en el norte cada uno va por su lado.
A esta confusión se suma la presencia del gupo Estado islámico en el noreste sirio. La ciudad de Raqqa es uno de sus bastiones.
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